La aparición de la pubertad determina la introducción de primerizas en el ciclo productivo

Establecer protocolos reproductivos al final de la recría es esencial para el éxito a largo plazo de las granjas y para garantizar una adecuada introducción de las nulíparas en las bandas de producción. El objetivo del estudio fue evaluar si una selección correcta de las primerizas a partir de la estimulación y detección de la pubertad mediante contacto con el verraco se asocia a diferencias productivas durante su vida.

En este estudio, para valorar la vida productiva de las primerizas, se enviaron un total de 6.085 hembras Camborough a una recría durante un periodo de 21 meses, para posteriormente enviar las cerdas cíclicas a una granja de producción. En esta recría se designó un área de exposición al macho para estimular la detección de la pubertad (celo en presencia del macho). A partir de los 170 días de edad, las primerizas tuvieron contacto directo con al menos 6 machos adultos, con un periodo de exposición de 15 minutos diarios durante 28 días. En el día 14, las primerizas no prepúberes se mezclaron en nuevos grupos. Las primerizas no cíclicas el día 23 (sin registro de desarrollo vulvar) se trataron con PG600 para inducir la pubertad. Las primerizas sin detección de pubertad a los 28 días fueron consideradas no seleccionadas (NOSEL).

Al final de la fase de recría, el 75 % de las primerizas fueron consideradas seleccionadas (SEL) (4.561/6.085). En la práctica, 4.980 primerizas se sirvieron a la granja, de las cuales 3.276 expresaron el celo sin intervención (SEL) y 1.137 mostraron el celo tras el tratamiento con PG600 (SELPG). Tanto las cerdas que no expresaron el celo de forma espontánea (NOSEL, N = 417), como las que no exhibieron signos de pubertad tras el tratamiento con PG600 (NOSELPG, N = 150), no fueron seleccionadas, pero se sirvieron a la granja para hacer el seguimiento y comparar con las cerditas seleccionadas.

El grupo SEL obtuvo el mayor porcentaje de inseminaciones y tasa de partos a la primera cubrición (P ≤ 0,05). Sin embargo, una vez las cerdas de los diferentes grupos fueron inseminadas, el porcentaje que llegó al parto 4 y el número de nacidos totales y destetados en esos 4 ciclos no fueron diferentes entre los grupos (P > 0,05). Por lo tanto, una efectiva selección de primerizas, ligada a una exitosa introducción en el rebaño es un factor crítico en la vida productiva de la cerda.

ParámetroSELSELPGNOSELNOSELPG
% Inseminadas97,996,694,388,9
% Parto a 1ª cubrición94,391,089,286,0
% Cerdas que llegaron a parto 473,070,270,070,4
Número de NT en 4 partos55,255,054,255,7
Número de destetados en 4 ciclos42,942,443,743,0
Fuente: “Select” gilts have superior lifetime productivity. G. Foxcroft1, J. Patterson1, N. Holden2, B. Gustafson², T. Werner², E. Triemert2, J.C. Pinilla3

1 University of Alberta, Canada, 2 Holden Farms Inc., Northfield, USA, 3 PIC

El comentario de PIC

María Ros y Patricia Blanco, Technical Service PIC Europa del Sur

La estimulación temprana mediante contacto directo con el verraco de la nulípara es vital para el desencadenamiento de la pubertad. Además, la edad y peso adecuados al momento de la inseminación son cruciales para asegurar una vida productiva exitosa en la granja.
Para ello, es importante proporcionar calidad y cantidad de machos destinados a la recela de las nulíparas. También hay que tener en cuenta los tiempos de recela que se utilizan, para que tanto las cerditas como los machos no se cansen y pierdan interés.

Trabajar con registro de celos es necesario para poder inseminar primerizas en su segundo o tercer celo, ya que es uno de los objetivos más importantes para que la primeriza pueda expresar todo su potencial.

Según el estudio anterior, las cerditas con estimulación de verraco directo que por sí mismas muestran celo natural, acaban inseminándose en mayor porcentaje que el resto. Las cerditas que no muestran un celo de forma natural, y que necesitan de una aplicación de tratamiento hormonal, tienen resultados productivos similares a los de cerdas que ciclaron de forma natural, aunque el número de cerdas inseminadas de este segundo grupo fuera menor. Por lo tanto, los tratamientos hormonales son una herramienta de gran ayuda para cerditas que por sí mismas no consiguen expresar el celo.

Estos protocolos se usarán para estudios de asociaciones más complejas entre el origen de camada de la primeriza, ratio de selección en las recrías y la vida productiva de las cerditas.

Publicado originalmente en “Investigación Comentada – SUIS”