Cómo la mejora genética en las reproductoras PIC® impacta hoy en la Producción porcina europea

Por Juan Manuel Herrero, Director de servicios genéticos de PIC España.

Rentabilidad


Durante años, los productores han estado muy enfocados en la mejora de la prolificidad, siendo este parámetro directamente asociado a la rentabilidad en las líneas maternas. Sin embargo, en los últimos 3-5 años ha incrementado progresivamente su interés por mejorar la calidad de esos lechones, así como su rusticidad y eficiencia de crecimiento en cebo.

En efecto, no debemos subestimar la influencia de las líneas maternas en los caracteres clave como crecimiento e índice de conversión, y es que a menudo parece olvidarse de que el 50% del producto final viene de las líneas maternas.

Por todo ello, en el programa genético de PIC se asume que una alta prolificidad solo tiene sentido cuando se acompaña de la producción de un lechón con buen crecimiento, alto peso al destete y conversión en todas las fases productivas.

Recientemente hemos publicado un estudio en el que se comparó el crecimiento de machos castrados Camborough® (cruce Landrace X Large White) con el mismo cruce de una genética competidora observándose una ganancia diaria en cebo de 875 g en los machos Camborough® frente a 866 g en el competidor, con una mejora de 80 gramos en índice de conversión.

Solo considerando este punto, la diferencia económica es significativa, llegando a los 2,68 € por cerdo. Con todo, este enfoque en la mejora de las líneas maternas busca complementar el enfoque económico de las líneas terminales para aumentar la productividad sin incrementar los costes operativos, optimizando el uso del alimento, reduciendo el coste por lechón y mejorando la rentabilidad del sistema.

Solo considerando este punto, la diferencia económica es significativa, llegando a los 2,68 € por cerdo. Con todo, este enfoque en la mejora de las líneas maternas busca complementar el enfoque económico de las líneas terminales para aumentar la productividad sin incrementar los costes operativos, optimizando el uso del alimento, reduciendo el coste por lechón y mejorando la rentabilidad del sistema.

Mano de obra


En España y en otras partes del mundo, conseguir mano de obra cualificada para las granjas y retenerla, está suponiendo un reto muy difícil de gestionar, especialmente en áreas geográficas poco pobladas, que suelen ser las zonas de mejor bioseguridad. El programa de mejora genética debe tener en consideración esta realidad.

Como resultado de años de mejora en el número de tetas, actualmente el 68% de cerdas de la Large White L03 de PIC tienen 16 tetas o más.

Con ello buscamos que el aumento de prolificidad venga acompañado de un alto número de lechones bajo la cerda. Siendo consciente de que el número de tetas no es suficiente para alcanzar este objetivo, durante más de 10 años hemos pesado todos los lechones puros al nacimiento en granjas élite consiguiendo reducir el porcentaje de lechones pequeños y así aumentar la homogeneidad de camadas.

Con todo ello, se ha conseguido una menor necesidad de movimiento entre lechones y facilitar así el manejo en partos. Para potenciar este punto todavía más, este agosto 2025 hemos incluido en el programa genético un nuevo carácter ligado directamente a la capacidad de crecimiento de los lechones en lactación y a la mayor capacidad lechera de las cerdas.

Quizás más asociado al concepto de rusticidad, la continua mejora en reducción de hernias escrotales y umbilicales sigue siendo una prioridad y por ello son caracteres incluidos en el programa genético combinando así el impacto de la genética con el necesario abordaje técnico en granja.
A nivel de cerda productiva, el incremento de la mortalidad en la industria en los últimos años supone un factor que afecta negativamente al trabajo en granja, tanto emocionalmente como en el manejo del día a día.

Hoy disponemos de tecnologías muy avanzadas con las que en el pasado apenas soñábamos. Un ejemplo es el fenotipado digital de aplomos, que utiliza cámaras y un software de análisis de imagen que captura y procesa datos morfológicos en tiempo real y que ha demostrado tener una alta correlación con la longevidad de la cerda. De esta forma podemos seleccionar aquellas cerdas con mayor potencial reproductivo y menor riesgo de eliminación temprana.

Con todo, si bien el programa genético va a ayudar a mejorar la longevidad, es necesario que en granja se haga una buena selección de las primerizas: buena condición corporal, mínimo de 14 tetas y aplomos correctos para seleccionar aquellas con mayor potencial reproductivo y menor riesgo de eliminación temprana.

Todos estos avances actuales y de futuro suponen para el productor una reducción de la carga de trabajo, menor necesidad de intervenciones veterinarias y mayor estabilidad en el censo reproductor. La eficiencia de la mano de obra permite dedicar más tiempo a tareas estratégicas y menos a cuidados intensivos, mejorando la rentabilidad y sostenibilidad del sistema.

Bienestar Animal


El bienestar animal es un componente esencial en la producción porcina moderna, tanto por razones éticas como por su impacto en la productividad.

Desde un punto de vista genético, este siempre ha sido un apartado muy difícil de trabajar por las dificultades de medir el fenotipo relacionado con el bienestar animal y las bajas heredabilidades de este tipo de caracteres.

Pero como comentaba en el punto anterior, estamos en una época de desarrollo activo de herramientas tecnológicas de grabaciones y análisis de imagen, y PIC está invirtiendo mucho en estas tecnologías para comprender y mejorar el comportamiento social de los cerdos.

Creemos que esta es la vía futura para aumentar todavía más la productividad a través de la mejora en bienestar animal.


Un novedoso estudio con sensores de proximidad, cámaras de video y algoritmos de inteligencia artificial pudo analizar las redes sociales (o interacciones entre todos los animales de un mismo corral) y la postura, ubicación y frecuencia de interacción entre animales, permitiendo identificar comportamientos atípicos, como agresividad o aislamiento.

La aplicación de estas tecnologías nos permite saber cosas que realmente sabemos, como que los cerdos forman jerarquías estables, pero además ahondar en detalles como que ciertos individuos actúan como nodos centrales en la interacción grupal. Al ser todos los animales del estudio puros con pedigrí conocido, hemos analizado como estos patrones de comportamiento llegan a tener heredabilidades estimadas entre el 20% y el 40%, que serían valores superiores a caracteres que responden bien a la mejora genética como por ejemplo el número de nacidos totales.

Estamos convencidos de que en el futuro, la mejora de caracteres de comportamiento permitirá seleccionar genéticamente animales altamente productivos, sociales y con mayor bienestar y que esta es una estrategia viable y realista para conseguirlo.

Gestión Sanitaria


La gestión sanitaria eficiente es fundamental para reducir pérdidas, minimizar tratamientos y prolongar la longevidad de los animales.

Abordar problemas sanitarios desde el punto de vista genético es posible de forma indirecta, pero requiere un programa muy intenso de recogida de datos.

El programa GNX terminal y GNX Materno incluye más 75.000 cerdas F1 criadas en granjas comerciales y 150.000 cerdos comerciales, susceptibles a enfermedades clínicas y subclínicas, y con padre y madre conocidos.

Estas cerdas y cerdos comerciales generan datos para calcular valores genéticos estimados en caracteres relacionados con la longevidad de la cerda y mortalidad del lechón.

Para el productor, esto significa una reducción en los sacrificios involuntarios, menor uso de medicamentos y mayor estabilidad en la producción. La mejora en la salud animal permite mantener animales más tiempo en producción, reducir costes sanitarios y mejorar la eficiencia global del sistema.

Reducción del impacto ambiental


Si bien el impacto de los programas de mejora genética se ha asociado históricamente al aumento de la productividad y la rentabilidad de la industria agroalimentaria, su influencia en la reducción del impacto medioambiental es mucho menos conocida y estudiada.

La sostenibilidad y la capacidad de adaptación a cambios regulatorios y de mercado son aspectos a tener muy en cuenta en la producción porcina actual.

Ya hay países que están planteando la posibilidad de incluir impuestos específicos a las granjas de producción en función de su impacto ambiental. No es descartable en absoluto que en un futuro, grandes superficies o empresas de alimentación consideraran factores de sostenibilidad ambiental para elegir a sus proveedores de carne.

El hecho de que PIC haya desarrollado programas genéticos y tecnológicos para seleccionar animales robustos, longevos y eficientes hace que la mejora genética contribuya directamente en la sostenibilidad de las granjas.

En este punto, ¿se puede cuantificar el impacto ambiental? Hoy en día, la ciencia aplicada incluye modelos de análisis del ciclo de vida (LCA) que se puede aplicar a la producción porcina para cuantificar el impacto ambiental de cada línea genética.

En un estudio reciente que se realizó comparando la genética PIC con la media de la industria se demostró, no solo que los programas de mejora genética porcina reducen significativamente la emisión de gases de efecto invernadero, el uso de recursos naturales y la generación de residuos, sino que además este impacto ambiental puede ser cuantificado de manera creíble y defendible mediante una Evaluación del Ciclo de Vida (LCA) conforme a la norma ISO.

De esta forma, el estudio comparativo del impacto ambiental de la genética en el año 2021 con el impacto previsto en el año 2030 concluye que la mejora genética se asocia a una reducción en la emisión de gases efecto invernadero de del 7-9% en el periodo de 9 años analizado asociado a la mejora genética.

La inversión en genética avanzada se traduce en sostenibilidad, rentabilidad y resiliencia frente a los desafíos del futuro.

Para saber más sobre cómo las hembras pueden ayudarle a construir un futuro mejor para sus granjas, visite las páginas de Camborough y X54, o contacte con su interlocutor habitual en PIC.