Hay muchas áreas de la producción porcina que están determinadas por pequeños detalles y requieren un plan. Un área que a menudo se descuida es cómo se manejan y cuidan los animales durante la carga y el transporte. Este proceso se realiza al final del ciclo de producción y los detalles pueden pasarse por alto. Es importante comprender las necesidades de los animales, tomarse su tiempo, observar a los animales y eliminar cualquier distracción que pueda impedir el éxito del proceso de carga.
1. Entender al cerdo.
Un operario cuidador no puede realizar correctamente su trabajo si no comprende el comportamiento y las reacciones naturales de los cerdos. Es fundamental que un operario entienda cómo ve el mundo un cerdo, cómo utiliza sus sentidos y cómo reacciona ante las situaciones.
2. No se precipite.
Es fácil suponer que si un operario empuja a los cerdos con más fuerza, éstos se moverán más deprisa, pero muchas veces no es así. El éxito de la experiencia de carga y manejo depende a menudo de lo cómodos que se sientan los cerdos al ser movidos. Una forma de minimizar el estrés durante la carga es mover a los cerdos a un paso razonable. Los animales que se sienten presionados a menudo responden negativamente y pueden rechazar el movimiento.
3. Observe si hay estrés.
Hay indicadores físicos que todos los cuidadores deben conocer y que muestran signos de estrés. Algunos de estos indicadores son respiración con la boca abierta, enrojecimiento de la piel, sacudidas físicas y vocalizaciones anormales. Si se observan estos indicadores, es importante ofrecer al animal un descanso antes de continuar con el proceso de carga. El estrés excesivo durante la carga y el transporte puede afectar en última instancia a la calidad de la carne.
4. Distracciones en el diseño del establo.
Siempre habrá problemas durante la carga, tanto en las de nueva construcción como en las más antiguas. Una de las mejores cosas que un cuidador puede hacer es observar las distracciones que pueden haber durante el recorrido con la vista a la altura de los cerdos. Algo tan simple como un cambio de color en el hormigón puede ser una distracción para el cerdo. Si usted nota que los cerdos continúan haciendo una pausa en un lugar, hay una buena probabilidad de que una distracción esté presente. Cuando el cuidador entiende estas distracciones y se adapta para superarlas el proceso de carga se moverá más suavemente. Si hay una distracción, es fundamental que el operario no empuje al animal con más fuerza, sino que deje que el animal reconozca que la distracción no es un riesgo para él. Si es posible eliminar una distracción, es importante hacerlo.
5. Reconocer el estado de salud.
Antes de iniciar el proceso de carga, es importante observar el estado de salud actual de los cerdos y ser consciente de los problemas de salud sufridos recientemente. Por ejemplo: si un grupo de cerdos ha sido expuesto recientemente a un desafío respiratorio, estos animales pueden tener una capacidad pulmonar más baja que los haría más susceptibles al estrés físico de ser trasladados. En tales casos, los operarios no deben forzar demasiado a los animales. Aunque puede ser difícil reprogramar un transporte, es importante recordar que la salud y seguridad de los animales es la máxima prioridad, y puede ser necesario reprogramar una carga.
La carga es el último paso del proceso de producción y representa la culminación de meses de trabajo e inversión. Una manipulación realizada con paciencia y cuidado salvaguarda el bienestar de los animales, lo que se traduce en un producto más rentable y de mayor calidad tanto para el productor como para el consumidor. Debe ofrecerse formación a los cuidadores de ganado con regularidad. Hay que recordar a todos los operarios de las granjas la importancia de su trabajo y proporcionarles consejos útiles para garantizar un proceso de carga seguro y satisfactorio. Existen herramientas y vídeos disponibles en PIC.com que tratan las técnicas adecuadas de carga y manejo, o póngase en contacto con su representante de PIC para obtener más información.