Tres aspectos ayudan a determinar la rusticidad de un animal.
El término “rusticidad” tiene distinto significado según quién lo use, pero los productores saben que es un componente importante en la cría de cerdos.
William Herring, Ph.D., Director de Desarrollo Genético de PIC, entiende la rusticidad como la capacidad del cerdo, a través de la mejora genética, de convertir alimento en crecimiento, convirtiéndose en un cerdo comercial de valor completo con una baja mortalidad y la capacidad de destetar muchos lechones de calidad, haciendo frente a los desafíos normales que representan las enfermedades. “Rusticidad es la capacidad del cerdo de resistir frente a esas condiciones, y se extiende a la capacidad de una ganancia eficiente en condiciones desafiantes”, explica.
RUSTICIDAD …
… capacidad del cerdo, a través de la mejora genética, de convertir alimento en crecimiento, convirtiéndose en un cerdo comercial de valor completo con una baja mortalidad y la capacidad de destetar muchos lechones de calidad, haciendo frente a los desafíos normales que representan las enfermedades.
Desde una perspectiva de mejora genética, Herring clasifica la rusticidad en tres categorías: solidez de la primeriza y de la cerda; lechones pre-destetados; y cerdos en fase destete-venta.
Solidez de la cerda
“Si observa las principales causas de pérdidas, y en última instancia de la mortalidad de las cerdas, la cojera es una de las causas principales, con independencia del sistema” dice Herring. “Cuando pesamos, escaneamos y evaluamos a los candidatos a reproductores, también puntuamos los aplomos de estos futuros sementales y primerizas. Miramos cómo caminan y los puntuamos de 1 a 9. Esta puntuación se utiliza en la estimación genética (EBV) que finalmente formará parte del índice”
“Independientemente de lo sobresaliente que sea el índice genético de un animal PIC, debe superar un examen visual de descarte relativo a la solidez de sus aplomos antes de convertirse en un reproductor élite” dice Herring.
“Contamos con un histórico de datos, además de pruebas de campo en grandes sistemas de producción, en los que puntuamos a los animales y les hacemos un seguimiento hasta paridades posterior para asegurarnos de que nuestro sistema de valoración de los aplomos sigue siendo eficaz” añade.
Estos factores contribuyen al destete de lechones por Cerda y año (PSY), indica, así como son cruciales otros rasgos como la producción de leche y la calidad de los candidatos a reproductores.
Lechones en fase pre-destete
“Nos fijamos en la capacidad del cerdo para llegar al destete y conseguir alcanzar esa fase a un peso elevado” explica Herring. “Nuestro programa reproductivo aborda ese aspecto de forma muy específica. Pesamos cada lechón de nuestras líneas maternas al nacer, porque sabemos que un mayor peso al nacer sienta las bases de la vida de ese lechón”. Estos cerdos crecen más rápidamente y son más robustos al destete, lo que les da una mayor probabilidad de convertirse en un cerdo de valor completo”. El peso al destete y la producción de leche son también valores importantes.
“En 2013 incluimos la supervivencia pre-destete en el objetivo reproductiva de PIC para todas nuestras líneas maternas”, indica Herring. “Seguimos buscando camadas numerosas, pero también queremos lechones más grandes en promedio al nacer. Sin eso, aparece la consecuencia no deseada de aumentar el tamaño de la camada, pero obtener lechones más livianos al nacer… y hemos visto respuestas positivas en sistemas productivos reales.”
Cerdos en fase destete-venta
Herring apunta que PIC aborda directamente el rasgo de la viabilidad desde el destete al engorde con datos singulares extraídos de su programa genético en granjas núcleo (GNX), iniciado hace 20 años. PIC cuenta con granjas de cerdas comerciales en todo el mundo que se asemejan en tamaño, manejo y sanidad a las de sus clientes. Estas granjas van desde unidades PRRS positivas a PRRS estables, y todas las de EEUU han experimentado algún brote de diarrea epidémica porcina.
“Utilizamos dosis seminales de nuestros bisabuelos de raza pura (GGP) como por ejemplo de nuestros PIC408, PIC337 o PIC800, y con ellas inseminamos con un solo verraco cerdas en granjas comerciales”, cita Herring. ” Identificamos a sus lechones con crotales individuales al nacimiento. Los seguimos individualmente desde que entran en los cebaderos hasta que salen hacia el matadero. Si alguno de ellos acabara causando baja, o fuera sacrificado durante este tiempo, quedaría registrado específicamente. Somos capaces de relacionar cada lechón con su madre y padre, y este sistema crea una secuencia de datos que nos es de gran utilidad para realizar una selección genética optima en las granjas élite de donde estos animales provienen.
El componente del bienestar
Además de los rasgos directos relacionados con la supervivencia descritos anteriormente, la rusticidad conlleva un importante elemento de bienestar animal. Los productores tienen la responsabilidad de garantizar que los animales prosperen en su entorno, que estén bien cuidados y que gocen de buena salud, señala Dan Hamilton, Ph.D., PIC Director de Desarrollo de Producto.
“Definitivamente queremos poner el bienestar animal en primer lugar” dice. “Además, es un coste económico enorme para el productor si un animal no prospera.”
El coste asociado a la producción, mantenimiento y alojamiento de un animal es significativo, por lo que cada animal deber ser productivo para cubrir los costes.
“La mortalidad y la morbilidad conllevan gastos adicionales, por lo que la rusticidad se convierte también en un gran factor económico.
“Y no hay que olvidar la moral de los trabajadores,” añade Hamilton. “Un animal robusto es un animal al que le va bien. Los trabajadores se preocupan por sus animales, así que resulta positivo en todos los sentidos.”
Valor y progreso colectivo
Cuando estos múltiples rasgos se agrupan en el índice genético, Herring dice que PIC puede impulsar el progreso genético más rápido al incorporar la selección genética basada en las relaciones de parentesco (RGBS) a su programa de indexación, un proceso que se ha venido utilizando durante los últimos siete años.
“Desde la introducción de la selección genética basada en el parentesco, hemos visto que la tasa de progreso genético ha aumentado aproximadamente un 35%,” afirma Herring.
Algunos sistemas cuentan con una sanidad y rendimiento excelentes, pero para la mayoría de los productores comerciales a nivel global, la rusticidad es “un rasgo increíblemente importante”, explica Herring.
“El coste de la pérdida de un cerdo al final del ciclo es muy alto, en relación con el gasto invertido en ese cerdo” señala. Lo mismo ocurre con las primerizas de reemplazo élite o las primerizas de paridad temprana.
“No es el valor de rescate de una hembra de reemplazo el el coste que se invirtió en esta” continúa. “En realidad es la cantidad de lechones que no entrarán en el Sistema y que la cerda nunca producirá si muere en el primer parto. Eso se convierte en una cifra extremadamente alta”.
Por ejemplo, si un productor maneja un sistema que desteta 32 lechones por Cerda y año y una hembra abandona el sistema un año antes, resulta una pérdida de 32 cerdos comerciales.
“Te das cuenta de lo importante que es el impacto financiero cuando lo miras en esos términos. Resulta tan crítico como cualquier conjunto de rasgos de la mejor genética” añade Herring. “No hay un solo productor que quiera ver morir a un animal o abandonar el Sistema demasiado pronto. Todos queremos ser buenos administradores de los animales que criamos. Puede ser un aspecto difícil de medir per que es increíblemente importante, lo que hace que la mejora genética vaya de la mano de una buena gestión.”
Para más información sobre rusticidad, contacte con el equipo de PIC.
Artículo aparecido en la versión online de “Farm Journal’s PORK (USA)”.