Estrategias para priorizar las tareas de cuidado de los lechones cuando la mano de obra es escasa
Los aumentos de rendimiento en la producción de lechones observados en los últimos años han ido acompañados, afortunadamente, de una tasa constante de supervivencia de los lechones hasta el destete – véanse las figuras 1 y 2.
No obstante, se observan diferencias interesantes, concretamente entre el 10% de los mejores productores y la media.
Aunque la diferencia en el tamaño de las camadas entre los dos grupos se ha mantenido constante en torno a un lechón, el 10% de los mejores ha sido más capaz de gestionar las camadas más grandes. Por término medio, la tasa de supervivencia en las explotaciones punteras es más de cinco puntos porcentuales mejor que la media de todas las explotaciones, véanse de nuevo las figuras 1 y 2.
¿Qué hacen estas explotaciones de forma diferente a las demás? Hacen de la supervivencia de los lechones una prioridad.
Dar prioridad al cuidado de los lechones puede ser especialmente difícil cuando la mano de obra es escasa. El Equipo de Servicios Técnicos de PIC ha recopilado consejos para ayudarle a conseguir un cuidado de alta calidad de los lechones recién nacidos (cuidado del primer día) incluso con limitaciones de personal.
Dos estrategias que pueden tener el mayor impacto en la supervivencia de los lechones son:
1. Reducir el número de lechones nacidos muertos.
2. Minimizar la mortalidad predestete (MPD) en lechones.
Estrategia 1: Reducir la incidencia de lechones nacidos muertos
Disminuir la tasa de nacidos muertos en un 1% podría ahorrarle casi 15 euros por cerda y año.1
La supervivencia de los lechones está influenciada desde antes del parto. Asegúrese de que todas las superficies de la sala de partos están limpias y desinfectadas, incluidas las esterillas, los suelos y los techos. Asegúrese de que los ventiladores, bebederos, comederos y fuentes de calor, incluidas las esterillas y las lámparas de calor, estén limpios y funcionen correctamente. Utilice siempre agua caliente para la limpieza y asegúrese de que la sala está seca antes de introducir las cerdas.
“Hace poco visité una granja con salas de partos que parecían limpias”, dice Patricia Blanco, Servicios Técnicos de PIC del Sur de Europa. “Cuando miramos más de cerca, descubrimos que las bombillas de las lámparas de calor estaban sucias. Eso hacía imposible que las lámparas de calor funcionaran correctamente”.
Otro factor de riesgo potencial para la supervivencia de los lechones es la duración del parto. Los datos de PIC muestran que la tasa de lechones nacidos muertos aumenta cuando el parto se prolonga más de 5 horas.
Una forma de reducir el tiempo de parto es elegir a las personas adecuadas de su equipo para trabajar en la paridera. La persona ideal presta mucha atención a la cerda que está pariendo activamente y vuelve constantemente para comprobar cómo está cada 20-30 minutos.
Rote los descansos para asegurarse de que un empleado está en la paridera tan a menudo como sea posible. Asegúrese de que las tareas que necesiten menos personal se realizan con el personal adecuado para que pueda priorizar la cobertura de partos.
Estrategia 2: Reducir la mortalidad de los cerdos antes del destete
Cuando la mano de obra es escasa, lo mejor es centrarse en los lechones pequeños pero viables, los que pesan entre 1 y 1,5 kg. Los lechones más grandes son más capaces de encontrar los pezones y amamantarse sin ayuda.
Si tiene capacidad para secar los lechones, utilice polvo secante, toallas de papel o una toalla de mano. Si el tiempo no le permite secar a todos los lechones, céntrese en secar y marcar a los lechones pequeños pero viables y coloque a los demás sobre o bajo la fuente de calor.
La ingesta de calostro también es importante para todos los cerdos. Sin embargo, la supervivencia de los cerdos pequeños depende en gran medida de que consuman la cantidad adecuada de calostro. Por lo tanto, concéntrese en ayudar a los lechones pequeños pero viables a empezar a mamar. Enseñe a los lechones a tetar en los 30 minutos siguientes al nacimiento y de nuevo 60 minutos después del nacimiento. Más información sobre el manejo del calostro también en ESTE ARTÍCULO.
Los ensayos de investigación de PIC muestran que el secado de los lechones y enseñar a tetar pueden reducir la MPD. Los resultados mostraron que la reducción total de la MPD fue del 38% durante los tres primeros días tras el parto. Secar y enseñar a tetar a los lechones redujo la MPD en un 53% en el primer día, lo que significa que hasta un 19% de la reducción de la MPD puede ocurrir en el primer día secando y facilitando la ingesta de calostro.
*Comparado con camadas sin secado de lechones y sin enseñar a tetar.
Tenga en cuenta los siguientes hechos cuando considere la cantidad de calostro disponible para cada cerdo.
- Las cerdas más viejas producen más calostro que las más jóvenes.
- Después de 24 horas, los beneficios del calostro ya no están disponibles para el lechón.
- La diferencia en las tasas de mortalidad entre cerdos ligeros y pesados se reduce cuando los cerdos pequeños consumen más de 250 ml de calostro.
- Investigaciones anteriores descubrieron que los lechones consumen unos 40 ml menos de calostro por cada lechón adicional que nace².
Elegir entre múltiples prioridades puede parecer imposible, pero puede confiar en sus decisiones cuando éstas se basan en datos. Al reducir el número de lechones nacidos muertos y minimizar la mortalidad antes del destete, puede mejorar la supervivencia de los lechones en toda la explotación.
“Si se centra en el cuidado de los lechones en el primer día, puede acortar los tiempos de parto, facilitar la ingestión de calostro y favorecer el calor y el bienestar de los lechones”, dice Patricia. “Estas tareas reducen la mortalidad predestete de los lechones y los prepara para afrontar con éxito las siguientes fases”.
¿Busca más estrategias para mejorar el cuidado de los lechones el primer día? Escuche el episodio 30 del podcast de PIC “The Squeal” para obtener recomendaciones sobre la medición de los indicadores clave de rendimiento de los cuidados del primer día.
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1 Typisch Ökonomie, Boehringer Ingelheim, 2018
2 Devillers et al., 2005